A una semana de recibir al América de Cali en partido único por el tiquete a la fase de grupos de la Copa Sudamericana, en Junior reina la incertidumbre producto de la derrota 2-1 en casa ante Envigado.

Para el técnico César Farías, este duro revés, que le quitó a su equipo la posibilidad de ser líder de la Liga, obliga a hacer una “profunda reflexión”.

Farías también consideró que el ambiente festivo que hubo previo al partido pudo haber contagiado a sus jugadores y hacerlos caer en distracciones y olvidarse de hacer las “pequeñas tareas”.

“Habíamos hablado que este era un partido en el que no nos podíamos distraer porque era muy riesgoso. Incluso, la noche anterior, don Fuad (Char) me llamó y me dijo que había que tener cuidado con los (equipos) pequeños. Lo intentamos, fuimos recios en la semana, fuertes, pero, por el ambiente festivo, nos distrajimos por momentos y eso no lo puede permitir un equipo de fútbol”, afirmó Farías en rueda de prensa.

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El venezolano atribuyó los dos goles del Envigado a errores del Junior. El primero tras una pelota que se perdió “tontamente” y el segundo luego de un tiro libre a favor.

“El equilibrio nunca se puede perder y después intentamos de una forma u otra y no la pudimos meter y esos son los detalles que no se puede permitir uno en fútbol. La reflexión debe ser profunda porque nos vamos a jugar cosas importantes y sabemos que estamos haciendo cosas buenas”.

Reconoció que varios de sus jugadores no tuvieron la misma “frescura” luego de haber disputado un partido en la altura de Tunja contra el Boyacá Chicó la semana anterior.

“No tuvieron la misma respuesta de otros partidos y para eso el plantel, cuando lo tienes completo, debes entender que lo tienes que rotar más allá de la crítica que se pueda venir”.